Decidí dejar de comer cinco frutas al día… y comprobar lo que mi cuerpo necesitaba.
Dejar de contar calorías, kilómetros cuando salía a hacer deporte…. y empecé a pasear.
Decidí dejar el móvil en casa, cuando quería disfrutar a compañía de alguien.
Decidí elegir cuando ser productiva… y cuando fundirme en el caos de la creatividad, o de la nada.
Decidí dejar de buscar «un futuro ideal»… y abrazar el presente más real, que no siempre es agradable.
Decidí dejar de publicar un post por semana, y escribir «sólo» cuando quiera contarte algo importante.
Y crear mis propias reglas y abrir mis propios caminos… atreviéndome a vivir lo incierto.
Decidí encontrarme a mi misma dentro… y en mis relaciones.
Porque todos tenemos algo que aportar… y algo que recibir.
Es en el encuentro AUTÉNTICO donde crecemos, donde podemos vernos y aprender…
Feliz lunes!